La semana pasada hablábamos de cómo preparar tu jardín para la primavera, pero nos dejamos un punto importante, ¡preparar la piscina!
Son muchos los que aprovechan la llegada del buen tiempo, para darse el primer chapuzón del año. Desde UNJARDÍNPARAMI queremos dejaros los siguientes pasos, para que los más valientes puedan comenzar con todos los preparativos, de cara a iniciar la puesta en marcha de la piscina en primavera. Pero, aquí lo dejamos para aquellos que empiecen más tarde y puedan tener la piscina lista para el verano.
Hay que tener en cuenta, tanto el tipo de agua de la piscina (salina/cloro), como el mantenimiento que haya tenido durante el invierno (vacía, llena). Dependiendo del punto de partida tendremos que seguir diferentes pasos, pero hoy hablaremos de los más generales:
Limpieza a fondo de la piscina
Sin duda alguna este paso es el más evidente y uno de los más importantes, es necesario quitar la suciedad tanto del agua como de la estructura de la propia piscina.
- Cubierta: Es el momento de retirar la cubierta en caso de tenerla. Nos ha ayudado a proteger la piscina durante los meses de otoño e invierno, esto ha provocado que sobre ella hayan quedado almacenados restos de hojas y de otros elementos del jardín. Debemos, no solo retirar todos esos restos, sino hacer la labor de limpiarla a conciencia con ayuda de cepillo y jabón. De esta manera la dejaremos preparada para el final de la temporada de verano o incluso lista para seguir utilizándola los días lluviosos de primavera y mantenerla aseada.
- Limpiar las paredes y el fondo de la piscina: podemos ayudarnos de un cepillo o de pistolas de agua a presión para ayudar a quitar toda la suciedad (hongos) que queda entre los azulejos.
- Quitar suciedad de la superficie del agua: mucha de la suciedad que hemos limpiado del fondo y de las paredes, termina formando parte de la superficie. Es aconsejable pasar el recoge hojas para conseguir eliminar toda la suciedad restante.
Comprobar el estado de los accesorios de piscina
Tenemos que revisar que todos los elementos de la piscina, que nos ayudan a mantenerla, funcionen correctamente. Estos accesorios también hay que limpiarlos, antes de comenzar con el saneamiento y desinfección del agua (rejillas, escaleras, depuradora, etc.).
Otra de las tareas a tener en cuenta es testear el funcionamiento de la instalación eléctrica encargada de la iluminación acuática.
Por último, pero no menos importante, también habrá que inspeccionar el sistema de filtración de la piscina que ha podido verse dañado tras el invierno y realizar los arreglos pertinentes.
Rellenar, sanear y analizar el ph del agua
En caso de haber vaciado la piscina, es momento de rellenarla. Se cuidadoso y controla bien el nivel de agua para luego añadir los productos de limpieza y los parámetros del agua en su justa medida.
Sanear y desinfectar el agua se encuentra entre los pasos finales para preparar la piscina una vez tengamos la piscina limpia. Es el momento de aplicar el cloro, o la sal en caso de tener piscina salina.
El último paso para poder darnos el primer baño es controlar que los niveles de pH del agua sean seguros después de haber realizado los tratamientos. Vigila que el valor se encuentre entre el 7,2 y el 7,6.
Esperemos que esta guía te sirva de ayuda para tener tu piscina lista para el verano, pero no te olvides del paso más importante: ¡disfrutar del primer baño!