Hemos diseñado este espacio en una zona de las afueras de Madrid muy expuesta a la climatología, tanto a los rigores del invierno como a los del verano. Utilizando las distintas orientaciones de la parcela y la protección del edificio, hemos generado un ambiente recogido de comedor y cocina exterior y otro más fresco, para disfrutar de la piscina y que funcione como una zona más lounge.
Para el diseño de la piscina tuvimos que ceñirnos a un tamaño relativamente pequeño, aunque que ha demostrado ser suficiente. Tiene zonas para socializar y un penetrante color azul oscuro que contrasta con la paleta general de color claro del jardín y la vivienda.
Para la zona de comedor se encargaron unos muebles de cocina fabricados a medida, realizados en acero inox y piedra artificial y con un diseño sobrio que contrasta con la madera de las paredes.