Hoy más que nunca nos damos cuenta de la importancia que tienen los jardines, y en general los espacios exteriores en nuestras vidas.
En UNJARDINPARAMI abordamos el diseño de jardines con el fin de generar espacios para el disfrute, sacando el máximo partido a cada espacio, tanto de día como de noche.
El estímulo de los sentidos es algo de lo que generalmente no somos conscientes, con esta situación que nos ha tocado vivir, debido al COVID-19, nos hemos dado cuenta de la necesidad que tenemos de estar en contacto con la naturaleza, estimular los sentidos en un espacio de calma y disfrute, un espacio íntimo en el que sentirnos a gusto, un lugar de recogimiento agradable y apacible.
Desde el inicio de la planificación, tenemos en cuenta no sólo que el diseño resulte estéticamente agradable, nos planteamos crear lugares de esparcimiento en los que nuestros clientes puedan pasar el mayor tiempo posible y disfrutar al máximo del espacio exterior que tienen.
Para que el estímulo de los sentidos no sea abrumador, es aconsejable ir incrementando los hitos o llamadas de atención de forma paulatina, dándole tiempo al cerebro a captar los estímulos e ir procesando la información de forma calmada.
Nos planteamos generar un espacio que a primera vista nos llame la atención e invite a ser recorrido. Durante ese recorrido encontraremos colores, perfumes, texturas, sonidos e incluso algún fruto con el que estimular el paladar.
Para que todos los estímulos obedezcan a una intención, tenemos muy en cuenta teorías de psicología ambiental.
Dependiendo de la gama cromática que seleccionemos estaremos transmitiendo unas sensaciones u otras, teniendo la capacidad de transmitir diferentes mensajes.
En Madrid, debido a la potencia lumínica y el clima seco y cálido de los meses estivales, nos gusta combinar colores fríos con los que apaciguar la sensación térmica. Para ello utilizamos combinaciones de azules y blancos en las que puntualmente puede aparecer otro color.
Al contrario de lo que ocurre en los meses en los que la temperatura disminuye, en ese momento nos gusta potenciar las gamas de colores cálidos, alegrando la vista y transmitiendo calidez.
Teniendo en cuenta la bajada de temperatura las noches de verano, nos parece imprescindible darle la importancia que se merece a la iluminación en el jardín. Una buena iluminación del exterior puede reconvertir el espacio, ofreciendo un jardín totalmente distinto entre el día y la noche.
Los perfumes deben ser aromas sutiles que nos acompañen durante el recorrido y hagan de la zona estancial un lugar agradable en el que estar. Se debe tener cuidado con la elección de las fragancias, evitando aromas muy intensos, fuertes y una mezcla muy variada de perfumes. Existen especies que intensifican su perfume las noches de verano, una vez más, será muy agradable un espacio con iluminación de exteriores ideada para disfrutar de todas las sensaciones que puede ofrecer el espacio.
Jugar con las texturas en el diseño, es un recurso muy interesante con el que potenciar o apaciguar características concretas de cada espacio. Los contrastes entre texturas de hojas pequeñas, con texturas de hojas grandes suele dar muy buen resultado. Las hojas grandes son muy frescas y dan aspecto tropical. Las pequeñas nos permiten generar fondos tenues sobre los que componer otras creaciones. Tener en cuenta las texturas en cuanto a la iluminación del jardín puede ayudarnos a crear juegos de sombras y luces muy agradables en el jardín nocturno.
En UNJARDINPARAMI nos gusta incluir bebederos invitando a los pajarillos a que visiten el jardín y nos alegren con su canto. Otro elemento con el que se consigue un rumor muy agradable y fresco, es incluir un elemento de agua. En este punto, hay que tener cuidado de no generar con el sonido ruidos, que pueden llegar a ser desagradables o excesivos. Para seleccionar el sonido del agua hay que tener en cuenta el tamaño del espacio circundante, buscando un sonido muy sutil.
Es emocionante que durante el recorrido del jardín aparezca un frutal o un elemento comestible, a los niños y no tan niños les gusta ver la evolución y la dedicación que supone el crecimiento de un fruto para finalmente experimentar su sabor.