Todos los jardineros, especialmente aquellos en el sur de Europa, necesitan considerar cómo el cambio climático afectará a las plantas que crecen.

El uso de plantas diferentes puede significar que la sensación del jardín va a cambiar, pero grandes resultados se pueden alcanzar fácilmente  por plantas que tienen exigencias muy bajas de humedad y de mantenimiento.

Muchas plantas resistentes a la sequía forman naturalmente comunidades de plantas que prosperan en todas las mismas condiciones y provienen de hábitats mediterráneos similares.

Los siguientes consejos le ayudarán a hacer su jardín más resistente a la sequía:

Cultivar profundamente el terreno introducir grandes cantidades de materia orgánica para mejorar la estructura del suelo, la retención de agua y la disponibilidad de agua para las plantas. Utilize abono para el jardín, el compost de setas, corteza compostada o estiércol bien descompuesto son todas formas adecuadas de usar materia orgánica.

Aplique la cantidad suficiente de fertilizantes porque las plantas utilizan el agua más eficientemente donde los niveles de nutrientes son suficientes. Pero no demasiado fertilizante, ya que esto puede animar un crecimiento demasiado exuberante en verano, requiriendo riego extra, y luego ser dañado por las heladas en invierno .

Elija las plantas con color gris-verde o plata deja, ya que reflejan los rayos del sol, lo que ayuda a conservar la humedad dentro de los tejidos vegetales.

Trate de elegir las plantas que se adaptan a tipo de suelo del sitio y de aspecto. Estas serán más tolerantes a diferentes condiciones climáticas, así como de los problemas de plagas y enfermedades.

Planta cosas cuando todavía son pequeñas. Así desarrollarán mucho mayor capacidad de recuperación ya que se adaptan a sus condiciones desde una edad temprana. Lo ideal plantar en otoño para que puedan tener algo de crecimiento antes de que llegue el tiempo seco.

Si te orientas hacia plantas mediterráneas, hagalo en primavera, cuando la tierra se está calentando. Muchas de estas plantas sufrirán  si se plantan en otoño y quizá las raices no sobrevivan al frío y la humedad durante el invierno.

Antes de plantar, moje completamente las plantas en sus macetas en un cubo de agua hasta que las burbujas dejan de salir a la superficie.

Asegure el riego en todas las nuevas plantas (y mantengalas regadas en la primera temporada de la siembra para asegurar que agarran bien) Una vez agarradas, se convertirán en mucho más tolerante a la sequía.

Después de la plantación,  cubra la cama con 5-7.5cm (2-3 pulgadas) de grava o, mejor aún, una capa de compost o de paja cubierto de grava, para ayudar a retener la humedad, mientras que las plantas agarran.

Considere hacer una jardín de grava (siguiente post en esta serie). Son de bajo mantenimiento y una buena opción si ya tiene un suelo arenoso o de grava.

Usted puede decidir hacer un jardín sin césped, pero si no se puede prescindir de esta característica en su jardín, entonces usted estará encantado de saber que los céspedes son sorprendentemente tolerantes a la sequía, y generalmente se recuperan bien en las lluvias de otoño, incluso si han quedado marrón y resecos la mayor parte del verano. El riego del césped rara vez debe ser necesario, y en todo caso, para mantener el césped saludable.

Muchas plantas de tipo mediterráneo aguantan bien inundaciones y repentinos estallidos de fuertes lluvias, que son otras de las previsiones del cambio climático. La RHS ha estado llevando a cabo una investigación en esta área, para poner a prueba la tolerancia de estas plantas a la inundación en las diferentes estaciones, que puede consultar en nuestra web.