Recibimos el encargo de mejorar el uso de este jardín, demasiado expuesto al Sol y los elementos. Las lineas de diseño previas no eran malas, pero el resultado práctico de la primera construcción del jardín provocó que no pudiera utilizarse prácticamente en ningún momento. En algunos elementos determinantes no pudimos influir, como la distribución y el tamaño de la piscina y la gran superficie solada, pero el reto resultó motivador y el resultado ha satisfecho a todo el mundo.
Pensamos realizar un proyecto con varias zonas de uso para maximizar el uso del jardín:
Un gran porche junto a la piscina, creando un salón de exterior bien orientado junto a la lámina del agua, que multiplica el disfrute de la piscina: será comedor, chill out para largas sobremesas y permitirá disfrutar de sombra también cerca de la piscina.
Un bosquete de árboles de sombra para contrarrestar el gran tamaño del terreno solado (ya existente) y ofrecer una alternativa natural al porche.
Huerto, bancos y ampliación de aceras, entre otros elementos de apoyo.
Todo ello planificado con el menor mantenimiento posible ysencillez formal.